Se discute mucho acerca de la Compensación por Tiempo de Servicios (CTS) y si es que debe poder ser utilizada libremente o no. Pero antes, debemos conocer el cálculo para precisar la cantidad que semestralmente las empresas deben depositar. Este monto se obtiene tras multiplicar el sueldo del trabajador por seis y después dividirlo entre 12.

En segundo lugar, este fondo acumulado no está a libre disposición de la persona porque se trata de un seguro de desempleo. A lo largo de los años, esta intangibilidad ha ido flexibilizándose, ya que anteriormente se podía disponer del 50% y actualmente, mediante la Ley N° 29352 y con el Decreto Supremo 016-2010-TR, se puede retirar el 70% del exceso de seis sueldos.

Por ejemplo: Un trabajador tiene un fondo de CTS de 20 mil soles y si su sueldo es de 2000, entonces los seis sueldos equivalen a 12, 000, y del exceso, que es 8 mil soles, se podrá retirar el 70%, lo que totaliza una cantidad de S/. 5, 600.

Pero el panorama podría cambiar, ya que se está debatiendo un proyecto de ley que reduciría la intangibilidad de seis a cuatro sueldos, lo cual significaría que el retiro de la CTS sea mayor. Ante este posible escenario se generaron varias críticas, entre las que señalan que el concepto de la CTS se perdería o que se trata de una propuesta populista.

También surgen otras cuestiones, ya que si el Estado libera la intangibilidad, ¿esto se entiendo como un favor o un derecho? Y lo más importante: Si al final de cuentas se trata del dinero que legítimamente el trabajador gana, ¿por qué el Estado no le permite disponer libremente de él?

¿Obligación o paternalismo?

Es aquí donde nace la frase/figura de una ‘paternalismo’ del Estado que, en su afán de ‘proteger’ a los trabajadores, les restringe el libre retiro y disposición de la CTS, apelando a la naturaleza de que es un seguro de desempleo. ¿Acaso las personas no son lo suficientemente mayores para hacer uso de su dinero?

En diálogo con Laley.pe, el abogado laboralista Jorge Toyama explica el rol que asume el Estado, el cual es de protector y si procediese a cancelar la intangibilidad, entonces provocaría una inestabilidad para el trabajador, porque es un eventual despido se quedaría sin respaldo económico alguno.

Y acerca de la reducción de la intangibilidad de seis a cuatro sueldos, Toyama Miyagusuku no considera que esto atente contra el concepto de la CTS, puesto que la finalidad de dicha propuesta es positiva, porque permitirá que los trabajadores puedan pagar algunas deudas acumuladas, sin embargo el error más recurrente es pensar que se trata de un cobro de “doble sueldo” el cual puedan retirar inmediatamente, y ante esto, recomienda dejarlo en el banco y guardar pan para mayo.

Con respecto a que si no se considera al trabajador lo suficientemente responsable del manejo de su propia economía, Toyama deja bien en claro que éstas medidas de retención se deben a la carencia de una cultura de ahorro, por lo que el papel protector que asume el Estado es precisamente para evitar que las malas decisiones de los trabajadores jueguen en contra de sí mismos. Además recalca que la razón de ser de este fondo no es la de un sueldo, sino que se trata de un seguro de desempleo, el cual sirve expresamente al cese del trabajo.

Bajo dicha explicación, es por ello que el Estado ‘obliga’ a la acumulación, y con respecto a las eventuales libertades de su intangibilidad no responde a un derecho, sino que son medidas para permitirle al trabajador contar con un respaldo adicional.