La denuncia hecha por Google en contra de un usuario, en Houston (Texas), por posesión de imágenes de abuso de menores en su Gmail, desató los cuestionamientos de que si se tiene privacidad en los correos electrónicos después que el famoso buscador afirmara que registra las cuentas para detectar la existencia de aquel tipo de archivos ilegales.

Esta libertad que tiene, no solo Google, sino todo proveedor de internet, se debe a una Ley federal en los Estados Unidos que los obliga a denunciar sospechas de pornografía infantil a la línea Cyber Tipline, para denuncias de este tipo. Fue así que se pudo contactar con el Centro nacional para Niños Desaparecidos y Explotados (NCMEC).

Es así que los proveedores de internet emplean un algoritmo que les permite revisar los correos electrónicos, como parte de su estrategia de afinar anuncios publicitarios de acuerdo a los intereses del cliente. Es por ello que Google escanea automáticamente las cuentas de Gmail de sus más de 400 millones de usuarios a nivel mundial.

Por lo tanto, en abril, Google actualizó los términos y condiciones que deben aceptar los usuarios de su servicio de correo electrónico. Estas dicen: «Nuestros sistemas automatizados analizan su contenido (incluyendo emails) para ofrecer características relevantes y personalizadas de los productos como resultados adecuados a sus intereses, y detección de spam y malware. Este análisis ocurre cuando el contenido es enviado, recibido y cuando está almacenado».