Luego que el docente universitario fuera detenido tras ser acusado de acoso y tocamientos indebidos contra una de sus alumnas de la Universidad San Martín de Porres (USMP), la fiscal Rosa Levy dio algunos detalles sobre la denuncia después de recoger el testimonio de la joven universitaria.

Levy indicó que pudo constatar los mensajes de texto que el docente le enviaba a la alumna y que lograban evidenciar el acoso: “Me remito a la versión de la agraviada. Estamos en plena investigación. Los mensajes van combinados con la parte académica y el acoso. Hay acoso”.

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Sin embargo, la magistrada evitó dar más detalles del caso, ya que falta interrogar a aún falta interrogar a Julio Alegría Cueto, así como realizar pericias psicológicas a los involucrados.

Por otro lado, la tía de la joven de quien se mantiene su nombre en reserva, afirmó que Alegría Cueto solía calificar con notas bajas a la estudiante, brindándole la alternativa de presentar un trabajo para mejorar su calificación.

Pero, según comenta, el profesor no quiso recibir el trabajo dentro de la universidad y pidió que la alumna lo ubique en su automóvil. Cuando ella se acercó, el profesor la encerró dentro del móvil a la fuerza. Posteriormente la llevó a un lugar desolado, donde le realizó tocamientos indebidos. Según la denuncia, es en ese momento que el docente la obligó a realizarle sexo oral.

Días más tarde, la joven recibió diversos mensajes de Alegría Cueto (los cuales serían los mensajes visualizados por la fiscal). En ellos, el docente la citó en un lugar de San Isidro para que pueda entregar su trabajo.

Cuando la universitaria está en camino al punto acordado, fue interceptada por un patrullero policial luego de que se percataron de que estaba llorando en plena vía pública. La joven le contó a los efectivos lo ocurrido, por lo que decidieron tenderle una emboscada al profesor.

Tras encontrarse con el profesor, este la llevó a un hotel en Lince, lugar donde los policías realizaron la intervención justo antes de que ingresen a una de las habitaciones.

Vale agregar que, tras conocerse la denuncia, la Universidad San Martín de Porrres como el Instituto San Ignacio de Loyola informaron que Alegría Cueto fue separado de su labor de docente en ambas instituciones.