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Sistema de justicia y prensa: difícil relación

Sistema de justicia y prensa: difícil relación

Una de las materias poco tratadas es la relación entre el sistema de justicia y la prensa, a pesar de que se trata de un ámbito de enorme importancia de cara a explicar muchas veces el comportamiento de la justicia y ciertamente de la prensa. En estas líneas nos interesa dejar anotadas algunas manifestaciones especialmente problemáticas de esta relación.

Por Roberto Pereira

lunes 24 de febrero 2014

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Así, en primer lugar, la labor informativa de la prensa sobre lo que ocurre en los predios de la justicia suele ser tomada con desagrado y hasta con hostilidad, especialmente jueces y fiscales. No ven con simpatía que se ventilen públicamente sus problemas institucionales, decisiones de gobierno, prácticas institucionales y sobre todo sus conflictos internos. De hecho, se trata de materias que son pocos conocidas o simplemente desconocidas por gran parte de la población, toda vez que existe una cultura institucional que evita que la información sobre estos temas fluya hacia la prensa. 

Otro tanto puede afirmarse de la cobertura informativa sobre la investigación y juzgamiento de casos. La justicia suele operar institucionalmente con un nivel desproporcionado de secretismo, con la coartada legal de que algunos aspectos de las investigaciones y los procesos deben mantenerse en reserva para garantizar la eficacia en la aplicación de la ley o los derechos de las personas involucradas, especialmente niños y víctimas. 
Sin embargo, no es infrecuente que la prensa “se las ingenie”, acceda y publique atestados, testimoniales, pericias, escritos de las partes e incluso información formalmente reservada. A veces, esto se explica por las filtraciones de información que hacen las partes, interesadas en que se conozcan o destaquen determinados aspectos y no otros, pero tampoco puede descartarse la existencia de un “mercado” diligentemente operado por asistentes y especialistas fiscales y judiciales. 
Los denominados “juicios paralelos” son quizá la expresión más problemática de la relación entre la prensa y la justicia. La fijación en la opinión pública sobre la existencia o inexistencia de unos hechos, como de la responsabilidad o no responsabilidad de una persona, suele poner en serios aprietos la independencia e imparcialidad de la justicia, como los derechos de las personas involucradas. Por eso es que en muchos casos de alto impacto público, las estrategias de defensa incluyan una línea de trabajo mediática, contratando incluso empresas especializadas en la materia. Muchos jueces y fiscales se quejan de que los órganos de control suelen ser “cajas de resonancia” de la prensa. 
Otro ámbito donde se aprecia una tensión importante entre la justicia y la prensa es el juzgamiento de casos en los que se alega el ejercicio abusivo de la libertad de expresión, sobre todo en los delitos contra el honor. Muchas veces se advierte una discrepancia radical entre los criterios de diligencia periodística que tienen los jueces y los que rigen en la prensa, produciéndose condenas penales y civiles que son interpretadas como “ajustes de cuenta” por todos los malos ratos que la prensa hace pasar a la justicia. Sin duda, un mayor debate sobre estos temas contribuiría a que las relaciones de la justicia con la prensa sean menos problemáticas.

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