En nuestro país, el 2 de abril de cada año se celebra el «Día del Abogado». ¿Por qué razón? Para hallar la respuesta debemos remontarnos a 1952. En dicho año, el Colegio de Abogados de Lima celebró por primera vez este día, conmemorando el nacimiento del jurista, político, militar y diplomático peruano Francisco García-Calderón Landa, quien llegó a ser presidente del Perú durante un breve periodo (marzo a noviembre de 1881) y es considerado el Patrono de la Abogacía Nacional. 

Fue mediante la Resolución Suprema del 14 de marzo de 1952 que se instituyó el día del profesional del Derecho. Pero, se consignó por error que ese día sería el 3 de abril.

Esta situación se rectificó mediante la Ley N° 23248, del 23 de abril de 1981. Esta norma concedió fuerza de ley a la mencionada resolución suprema que señaló la fecha del natalicio de don Francisco García-Calderón Landa como el Día del Abogado. Pero, además, se precisó que «la celebración del Día del abogado tendrá lugar el 2 de abril de cada año», retificándose el error incurrido en 1952.

Algunos detalles de la biografía de García-Calderón: nació en Arequipa en 1834. Fue profesor de la Universidad Nacional de San Agustín y de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (también fue rector de esta última). Además fue autor del “Diccionario de la Legislación Peruana”. Igualmente, fue presidente del Congreso Constituyente de 1867, ministro de Hacienda en 1868, decano del Colegio de Abogados de Lima de 1874 a 1876 y senador por Arequipa de 1876 a 1879.  

En la Guerra del Pacífico, Francisco García-Calderón Landa participó en las batallas de San Juan y Miraflores, defendiendo la capital durante la caída de Lima en 1881. Luego de ello, un grupo de notables lo nombró Presidente Provisorio del Perú, en el denominado «Gobierno de la Magdalena», asumiendo el mandato el 22 de julio de 1881 por disposición del Congreso Extraordinario de Chorrillos.

En su condición de presidente del país, se negó a firmar cualquier tratado de paz que implicara una mínima cesión de territorio, oponiéndose a que Chile impusiera el ya entonces superado derecho de conquista. Por ello, fue arrestado y desterrado por las tropas del general chileno Patricio Lynch, jefe de las fuerzas de ocupación. El 6 de noviembre de 1881 fue embarcado en el “Cochrane” rumbo a Chile. Luego, la historia es conocida: Miguel Iglesias es nombrado Presidente Provisorio y este avaló el Tratado de Ancón que significó la pérdida de Tarapacá y Arica.