El juez supremo titular del Poder Judicial, César San Martín Castro, afirmó que la organización y funcionamiento de la Sala Penal Nacional, que forma parte del estatuto elaborado por el Poder Judicial, fue realizado cumpliendo el mandato de la ley.

En una entrevista radial, San Martín Castro descartó la manipulación de jueces en el Poder Judicial: “En ningún momento se tuvo como eje un cambio de los jueces de cara a los procesos en curso, no hay una manipulación de los jueces sino una razonable decisión al ordenamiento de la Sala Penal Nacional, que ahora tiene origen legal”.

Vale indicar que dicha reglamentación fue elaborada por una Comisión de Presidentes de las Salas Penales de la Corte Suprema, presidida por San Martín Castro, donde se estableció las competencias de la Sala Penal Nacional y la posterior convocatoria al concurso de plazas de jueces en esta sede por su reciente carácter de corte superior.

Asimismo precisó que el traslado de los casos de corrupción de funcionarios entre los que figura el caso Odebrecht, por disposición del Poder Judicial, al Sistema Nacional Anticorrupción, es legítimo por el principio de especialización.

“El principio más importante es el de especialización en la Teoría del Derecho, porque cuando uno especializa y crea órganos especializados se entiende que estos tienen una primacía, ya que no se trata de gravedad de delitos sino cuál tiene la competencia originaria”, indicó.