La fiscal provincial del Callao María Quicaño Bautista, quien es investigada preliminarmente por presunta inconducta funcional en las pesquisas por la desaparición de Solsiret Rodríguez, negó que haya existido una “demora” en las diligencias que llevó a cabo para resolver el caso.

En entrevista con RPP, la segunda fiscal encargada del caso respondió a los cuestionamientos que surgieron a raíz del hallazgo de los restos de la estudiante que fue reportada como desaparecida hace casi cuatro años. “Todos los actos de investigación que he realizado están dentro de la misma carpera fiscal. Ahí se va a establecer de manera objetiva que actué dentro de mis funciones como fiscal y que no ha habido ninguna demora en resolver lo que correspondía”, expresó.

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“Puedo responder por las acciones y todo el trabajo que he realizado, y ese trabajo ha sido cumplir lo que corresponde conforme a ley, como todos los casos. En todos los casos, se investiga, se busca la verdad y se establece responsabilidades. Siempre lo he hecho así. Más que [ser] diligente, es necesario contar con las herramientas para resolver este tipo de casos”, agregó.

Asimismo, la fiscal Quicaño descartó haber archivado el caso. Según explicó, una vez culminado el plazo que el Código Procesal Penal establece para realizar la investigación, hay tres opciones: archivar, formalizar la acusación u optar por la reserva provisional. Y en este caso, se decidió lo tercero.

“Nunca se archivó, pero como hasta ese momento no se había podido identificar autores del hecho, mi despacho decidió continuar con las investigaciones y se optó por la reserva provisional. Si no se ha logrado hacer la investigación, la Policía debe continuar con las pesquisas que permitan lograr esa identificación”, manifestó Quicaño, quien estuvo a cargo de la investigación por un año y cuatro meses aproximadamente.

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La fiscal, además, señaló que el principal obstáculo para proceder de manera célere con las diligencias fue el retraso en el levantamiento del secreto de las comunicaciones de los hoy implicados en el caso, Andrea Aguirre y Kevin Villanueva. “Las empresas de telefonía concentran en Lima todos los pedidos a nivel nacional, y tal cual llega, tal cual se atiende. Hay información abundante y debemos esperar a que se canalice”, sostuvo.

Por otro lado, la fiscal también se pronunció sobre la relación que tiene con la titular del Ministerio Público, Zoraida Ávalos, ya que actualmente se desempeña en el Área Especializada en Enriquecimiento Ilícito y Denuncias Constitucionales, que depende directamente de su despacho. “La única relación que tengo con la fiscal de la Nación es laboral, no tenemos ningún tipo de amistad”, puntualizó.