Ya es conocida la intensificación del trabajo de la FIFA para erradicar toda manifestación violenta de los escenarios del deporte rey con su campaña que promociona “Fair Play” (juego limpio) para lo cual sus exigentes parámetros han alcanzado tanto a jugadores como a entrenadores y aficionados. 

Antecedentes como la suspensión de estadios e hinchas, para darle una imagen más limpia al fútbol, han llevado a la FIFA a estudiar con rigurosidad diversos casos de disciplina durante el mundial de Brasil. Una de ellas, la impuesta al jugador uruguayo Luis Suárez por haber mordido a un rival durante el partido contra Italia.

A partir de ese hecho la FIFA abrió una investigación de oficio y se determinó la suspensión del jugador por 9 fechas oficiales con su selección y el impedimento de cualquier actividad futbolística FIFA por cuatro meses. Si fue o no excesiva la pena, da para la polémica, pero por el momento, repasaremos otras sanciones más o igual de severas durante la celebración de los mundiales. 

Caso Shaker

En el mundial de México 86, durante el partido entre Irak contra Bélgica, se produjo un incidente que produjo la sanción más dura de la historia de los mundiales. El jugador iraquí, Samir Shaker, escupió al árbitro colombiano Jesús Díaz. Aunque parezca increíble, solo recibió una tarjeta amarilla, pero el hecho provocó que la FIFA actúe de oficio y lo suspendiera por un año.

Este fue un caso aislado de agresión contra un árbitro en un mundial, pero en lo que se refiere al contacto físico entre jugador y jugador y las prácticas ilegales, las faltas más comunes son los codazos, las patadas y las pruebas antidopaje que han provocado los castigos más duros que incluso astros de la talla de Maradona, lo sufrieron en su oportunidad.

Lo que dice el reglamento

Y es que, según el Código Disciplinario de la FIFA (CDF), adicionalmente a la expulsión del campo de juego, se suspende de más partidos dependiendo de ciertas acciones que cometan los jugadores en perjuicio de otros jugadores o de los propios árbitros, llámese también oficial de partido.

El artículo 48, Conducta incorrecta frente a adversarios u otras personas que no sean oficiales de partido, señala que, a parte de la expulsión, se les puede suspender de un partido por conducta antideportiva contra los rivales. Pero en caso de vías de hecho (codazos, puñetazos, patadas, etc.) contra un adversario, son como mínimo dos partidos y como mínimo seis, en caso de escupir a un jugador o a cualquier otra persona que no sea un oficial de partido. Adicionalmente y en todos los casos, se puede imponer una multa.

El artículo 50 sanciona el hecho de intervenir en una riña o pelea con una suspensión de seis partidos como mínimo. Uno de los más severos es el artículo 58 que trata acerca de la discriminación. Se suspenderá con cinco partidos como mínimo a quien humille, discrimine o ultraje a una persona o grupo de personas, mediante palabras o actos, debido a su raza, color de piel, idioma, credo u origen, de manera que atente contra su dignidad humana.

Sumado a eso, se le prohibirá al infractor acceder al estadio y se le impondrá una multa no inferior a 20 mil francos suizos (US$ 22, 445). Y si se tratase de un oficial de partido, entonces la multa asciende como mínimo a 30 mil francos suizos (US$ 33, 668).

Y en caso de que la infracción sea cometida por los aficionados, entonces la pena recaerá sobre el club del que son simpatizantes, con sanciones suplementarias tales como disputar un partido a puerta cerrada, una derrota por 3 goles a cero, la sustracción de puntos o la exclusión de la competición.

Volviendo al jugador, según el artículo 49, será sancionada cualquier conducta antideportiva contra un oficial de partido, con un mínimo de seis meses en caso de vías de hecho (codazos, puñetazos, patadas), doce meses si se le escupe (el mencionado caso del iraquí) y, además, una sanción económica. 

Finalmente, el artículo 53 (Incitación a la hostilidad o a la violencia), un jugador que incite públicamente a la violencia u hostilidad será sancionado con una suspensión de un año como mínimo y una multa de 5,000 francos suizos.

Suárez fue encontrado culpable de transgredir el artículo 48, de conducta incorrecta frente a un adversario, además del 57 que trata acerca de ofensas contra el honor de una persona o contravenga a los principios de la deportividad o la moral deportiva.

Antecedentes en EE.UU. 94

El caso para definir lo sucedido con Suárez fue el que protagonizó Mauro Tassotti en el mundial de Estados Unidos 1994, cuando le propinó un codazo al jugador español Luis Enrique, rompiéndole el tabique. El árbitro del encuentro no sancionó el hecho pues no lo advirtió pese a que vio al español sangrar. En aquella oportunidad, la FIFA actuó de oficio y sancionó al italiano con 8 encuentros y no volvió a vestir los colores de su selección.

En el mismo mundial, el brasileño Leonardo le fracturó el cráneo al estadounidense Tab Ramos de un codazo. Además de ser expulsado del encuentro, se le prohibió jugar por el resto de la competencia. Brasil se coronó campeón.

Alemania 2006

En aquel mundial, el italiano Daniele De Rossi fue suspendido en la fase de grupos, por cuatro partidos por propinarle un codazo al estadounidense McBride y no volvió a jugar hasta las semifinales.

Ese mundial también es recordado por el cabezazo que el francés Zinedine Zidane le pegó en el pecho al italiano Marco Materazzi en la mismísima final. Por ese hecho, el francés fue sancionado con dos encuentros, pero se le conmutó la sanción pues se retiró después de ese encuentro y cumplió su sanción con trabajos comunitarios con niños. Zidane era reincidente, pues en 1998 se le suspendió por dos partidos después de ser expulsado en la fase de grupos por empujar y pisarle la espalda a un rival.

Brasil 2014

El camerunés Alexandre Song solo jugó un partido pues en el segundo se le impuso una suspensión de tres partidos por un codazo. Por ello, aún adeuda dos fechas oficiales con su selección para que pueda volver a representar a Camerún. Otro hecho, pero previo a esta cita, fue protagonizado por el capitán de Croacia, Josip Simunic, quien tras clasificar en el repechaje contra Islandia, realizó un saludo nazi, por lo que la FIFA lo privó de jugar el mundial, dándole 10 fechas de suspensión y el pago de 30 mil francos suizos.

Casos de sanciones por dopaje

Otra infracción que la FIFA no perdona es el consumo de sustancias prohibidas que puedan influir en el rendimiento del deportista. En el Reglamento Antidopaje de la FIFA, en su artículo 14 (Suspensión impuesta por el uso de sustancias o métodos prohibidos), señala que el periodo de castigo, de comprobarse el uso de dichas sustancias, será no menor de dos años.

Alemania 74

Entre los casos de dopaje en una copa mundial comenzaron en el de Alemania 74, cuando un hatiano, Ernst Jean, dio positivo por efedrina en el partido ante Polonia. Pero, como en aquel entonces no existía reglamento alguno sobre el tema, no fue sancionado. Sin embargo, en su país fue sancionado por dos años de prisión clandestina.

México 86

Diferente fue el caso del español Ramón Calderé quien dio positivo a esta prueba, pero tras alegar que se trataba de un medicamento para combatir la diarrea, solamente se le sancionó con un encuentro.

EE.UU. 94

Sin duda, el caso más icónico es el del astro argentino Diego Armando Maradona quien tras ser sorteado para la prueba una vez finalizado el partido contra Nigeria en el mundial de EE.UU. 94, dio positivo a cinco sustancias, por lo que sería sancionado después de su contraanálisis. La FIFA lo expulsó del torneo y sufrió 15 meses de inactividad. Aquella, fue la última vez que vistió los colores de su país.