La asignación familiar es un beneficio laboral que gozan los trabajadores del sector privado cuando tienen a su cargo a uno o más hijos menores de 18 años.

Sin embargo, el Proyecto de Ley 4925/2022-CR busca ampliar este concepto para beneficiar a los hijos que tengan bajo su cargo el cuidado de sus padres ancianos y no tengan hijos menores de edad a cargo. 

La iniciativa contempla que para reciban este beneficio laboral, además de no contar con hijos menores de edad a cargo, las necesidades básicas de los menores tendrían estar cubiertas.

Esta iniciativa busca modificar la Ley 25129, Ley sobre los trabajadores de la actividad privada cuyas remuneraciones no se regulan por negociación colectiva, percibirán el equivalente al 10% del ingreso mínimo legal por todo concepto de Asignación Familiar.

¿Cuáles serían los requisitos?

Los requisitos serían tres: el primero, ser mayor de edad y no contar con ingresos suficientes para su manutención; el segundo, tener a su cargo a sus padres ancianos, quienes deberán tener una edad mínima de 60 años y ser dependientes económicamente de sus hijos.

Y por último, contar con una evaluación socioeconómica que determine su situación económica y familiar. 

En la exposición de motivos, el congresista Jorge Luis Flores Ancachi, autor de esta iniciativa explicó que su propuesta contempla una doble dimesión: por un lado beneficia al hijo, quien ostentará un ingreso económico  exclusivamente para el cuidado de su padre, mientras que por otro lado, el padre ser vería beneficiado al contar con un apoyo adicional para su protección. 

Es así que ambos se beneficiarían, pues se fomentaría una cultura de protección en favor de la población anciana del país, de acuerdo al documento al que tuvimos acceso en Laley.pe. Esta iniciativa es analizada en 

Finalmente el proyecto desarrolla un escueto apartado obre el análisis costo-beneficio: sí tendría un costo financiero en el presupuesto del Estado, sin embargo, de acuerdo al proyecto de ley, de aprobarse esta iniciativa los beneficios para mejorar la calidad de vida de la población anciana lo compensaría.

En términos del proyecto: a pesar de los posibles costos que puedan derivarse de la modificación propuesta en la ley, los beneficios sociales y humanitarios para la población anciana y la sociedad en general, son incalculables.

Por lo tanto, se considera que el costo-beneficio de la modificación propuesta en este proyecto es favorable y justifica su aprobación.