El ministro de Economía, Carlos Oliva Neyra, descartó que la reforma laboral que prepara el Ejecutivo suponga un recorte de los derechos laborales, tales como la CTS, vacaciones o gratificaciones. Pero sí explicó que es necesario se discuta sobre la regla que permite reponer a un trabajador despedido de forma arbitaria.

Explicó que actualmente existe sobrecostos laborales para que proceda el despido, pues además de que el empleador debe pagar una indemnización por despido arbitrario, la reciente jurispredencia laboral ha reconocido la indemnización por daño moral y los daños punitivos. Y si a eso se le suma la posibilidad de la reposición, señaló que en el país se presenta un escenario de altos costos para las empresas en ocasión del cese laboral.

Por ello, el Oliva Neyra consideró que el pago de una indemnización debería impedir que el trabajador despedido pueda obtener judicialmente la reposición al centro de labores. 

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Así, el titular del MEF señaló que la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha recomendado que no son adecuadas varias indemnizaciones para los supuestos de un trabajador despedido. «Actualmente se le paga 18 sueldos y luego se le repone, debería ser en todo caso una indemnización o reposición”, puntualizó.

Oliva aclaró que existen casos en los que no se discutirá sobre la procedencia de la reposición, como los supuestos de cese por filiación sindical, trabajadora embarazada, discriminación y otros.

Por otro lado, el ministro Oliva remarcó que la propuesta de reforma laboral se va a presentar a fin de reducir el alto porcentaje de informalidad laboral que mantiene el Perú (superior al 70%). Con estas propuestas se espera lograr aumentar el trabajo formal, aseveró.