El presidente Martín Vizcarrra aseguró que el proyecto de adelanto de elecciones que propuso durante su mensaje a la nación del último 28 de julio, no será un tema de negociación con el titular del Congreso. Más bien refirió que la implementación de dicha medida será el primer punto que discutirá la próxima semana con Pedro Olaechea.

“El primer punto de la reunión de la próxima semana será el adelanto de elecciones. Después se podrá hablar de otros temas”, precisó ayer a la prensa, luego de participar en los festejos por el 90 aniversario de la reincorporación de Tacna al Perú.

Vizcarra también señaló que el Parlamento “no puede condicionar nada”. Asimismo, señaló que no renunciará a la presidencia porque tiene “la responsabilidad de sentar las bases para un nuevo país, mejorando las condiciones de vida de los peruanos”. Refirió que ese compromiso es más fuerte que “las falsas denuncias, intentos de vacancia y continuas interpelaciones a sus ministros”.

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En relación al cronograma para aprobar su propuesta de adelanto de elecciones y someterla a referéndum, dijo que se “puede cumplir perfectamente si hay voluntad” y que ello tampoco será objeto de negociación en la reunión que sostendrá con el presidente del Congreso.

El mandatario también dijo que no se pronunciará aún sobre la opción de presentar una nueva cuestión de confianza ante el Congreso en caso se rechace el proyecto de adelanto de elecciones, aunque refirió que varios constitucionalistas han afirmado que no habría problema en que el Ejecutivo prosiga ese camino. “Prefiero esperar. Confío en que el Congreso estará a la altura”, aseveró.