En una entrevista para RPP Noticias, la fiscal Rocío Sánchez, a cargo de la investigación de la organización criminal «Los Cuellos Blancos del Puerto», cuestionó las decisiones judiciales que ordenaron la variación de la prisión preventiva por arresto domicilio de tres investigados por este caso. Asimismo, sostuvo que –en contra de lo que se realiza en el resto de países de América Latina–, en el Perú se está liberando a muchos presos preventivos por delitos graves que deberían estar excluidos y, sobretodo, aún cuando los abogados en audiencias no han acreditado que sus patrocinados pertenezcan realmente al grupo vulnerable de contagio por la COVID-19.

Así también, señaló que estas decisiones no permiten lograr el deshacinamiento de los penales y que esta pandemia está utilizándose de pretexto y de manera fraudulenta para dejar sin efecto varias prisiones preventivas, lo que a futuro entorpocerá u obstaculizará la investigación de esta clase de procesos complejos, en los que se han recabado testimonios de colaboradores eficaces y que han facilitado sus nombres en la investigación de esta organización criminal con presuntos vínculos con el narcotráfico. 

«En los tres casos [de «Los Cuellos Blancos del Puerto] les han dado una detención domiciliaria, pero no cumplen los requisitos y, para efectos prácticos, han conseguido lo que han solicitado: salir de la cárcel y eso genera un riesgo porque las investigaciones complejas se nutren de la participación, por ejemplo, de colaboradores eficaces». Mencionó la titular de la investigación al medio de comunicación. 

Finalmente, la fiscal Sánchez advirtió que estas variaciones conforman una perturbación al trabajo que ha venido realizando el Ministerio Público; no obstante, para otros (abogados defensores) constituye una oportunidad para que los involucrados salgan de prisión.